Prejuicios constantes o antojadizos (Parte I)

Mi frase de hoy: Dime cómo ves a los demás y te diré que te equivocas…
Mira cada imagen comparada y piensa que te parece que es, fuera, fuese, o parece cada individuo.

Lo común para la mayoría (no me incluyo) sería admitir que el hombre inteligente es el de la derecha, por el uso de gafas, peinado engomado y traje nerd; y dirían el de la izquierda tiene apariencia de orate o animador de algún espectáculo circense.

A lo que yo diría el de la derecha puede que use gafas, pero a lo mejor es por el exceso de videojuegos, el traje y el peinado pueden deberse a que le agradan a su madre, los libros pueden ser guías de juegos, manga o comics. Pero el de la izquierda es mundialmente conocido autor de la teoría de la relatividad, y poseedor de una gran masa cerebral y coeficiente intelectual indescriptible a la fecha.

En cuanto a la música, el tiempo ha demostrado que la excentricidad, muchas veces estética, es la que define el tipo o género al que se dedica el compositor o músico, y de primer plano es lo que primero ve el público. Entonces, los demás dirían: el de la izquierda tiene pinta de nerd; mientras que asumirían la idea de que el de la derecha si es un músico por tener el glamour de rockero de los  80s.

Pero no, el de la izquierda es Akira Yamaoka; y me agrada en gran parte su composición para el Soundtrack de los videouegos de Silent Hill, podría admitir que sin los sonidos y musical ambiental, Silent Hill no sería lo mismo, provocar un ambiente musical adecuado para provocar el terror, desesperación, frustración o agonía, es algo complejo. Y el tipo de la derecha puede ser sólo un amante de la música rock o heavy cuyos frustrados sueños de alcanzar la fama, sólo se quedaron plasmados en el traje.

Yendo a un punto un poco fuera del tema. El montón diría la chica linda es la de la derecha, la otra, ni hablar, por asumir los patrones estéticos que dicta la colectividad. (Bueno, en lo personal veo la belleza de manera distinta)

Error, el tipo de la derecha, (si, un varón) es Andrej Pejic,  un modelo andrógino, que no tuvo que recurrir a mayor operación, tratamiento hormonal o a un exagerado travestismo para verse como tal, y poder codearse en pasarelas con chicas “normales”; y según sus propias palabras “gusta jugar de la ambigüedad de género, y no se considera homosexual”

Como ves, nunca es bueno cegarse en la primera percepción visual que tienes sobre los demás.